El Chorro de Escaba

De nuevo en el sur tucumano

El sábado pasado salimos de trekking con los changos. Hemos ido al Chorro de Escaba, que queda cerca de Alberdi. Nos debíamos una salida al sur tucumano y por mi parte no iba a esa zona desde 2019 cuando llegue a Los Pizarro. Esta vuelta coordinamos para ir con Gonzalo, Esteban y Benjamín.

Comenzamos el viernes por la noche en la finca de la familia de Gonzalo cerca de un pueblo ubicado entre Alberdi y Aguilares, donde luego de cenar unos choris a la parrilla, disfrutamos de consumir caña recién cortada (hacía unos 25 años que no la consumía así) y unas deliciosas paltas.

El sábado de madrugada salimos hacia Escaba y tuvimos la suerte de ver una liebre en el camino, algo que siempre alegra mis excursiones. Aunque sueño con ver un puma, cualquier encuentro con la fauna local es especial para mí.

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El trayecto entre la Ciudad de Alberdi y el Dique Escaba dista de un poco más de media hora y 22 km de distancia. La ruta esta asfaltada hasta pasando La Calera. Este mismo camino, pasando el dique, llega hasta Balcozna en Catamarca.

Sobre el dique

Si bien no hemos dedicado el día a hacer turismo en el dique mismo, el espejo de agua se ve desde las alturas y es un lugar importante para la gente del lugar.

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El nombre Escaba deriva del vocablo quechua que significa “lugar donde se encuentran las aguas” en referencia a la unión de los ríos Singuil, Chavarría y Marapa, junto con los arroyos Yacuichacuna, Huasarroyo, El Chorro y La Mora. La Villa se ubica en la base de las Sierras de Narváez y los principales tributarios son los ríos Chavarría, que ingresa por el noroeste, y el Singuil, que ingresa por el sur.

El poblado de la Villa de Escaba cuenta con aproximadamente 400 pobladores y dista unos 3 km del paredón del dique

Según he podido leer en el libro Historia de Alberdi (que forma parte de la colección Historia de los municipios que apareció en 2016 para el Bicentenario) “Escaba era un lugar mágico. Zona de asiento de los habitantes originarios de nuestras tierras, además de hogar de una riquísima fauna y flora. Sus tierras, enormes y fértiles, se encontraban prácticamente inexplotadas por el hombre.”

También, el libro dice que el dique fue crucial para el riego de extensos territorios agrícolas a través de canales, pero implicó consecuencias negativas como la modificación del paisaje, la alteración del ecosistema y el traslado forzoso de un pueblo, lo cual afectó tanto a los habitantes como al patrimonio cultural y natural de Tucumán.

La obra involucró la inundación de un área con restos arqueológicos y el traslado de la población a Escaba de Abajo. La cuenca fluvial del embalse se formó con varios ríos, y la estructura incluyó una presa de contrafuertes tipo Ambursen. Finalmente, la inauguración del dique Escaba fue en un feriado provincial el 30 de octubre de 1951.

Esta zona también es famosa por contar con la presencia de una gran colonia de murciélagos Tadarida brasiliensis (Molossidae). Estos animales son muy importantes para el ecosistema.

Dada la importancia de los murciélagos, especialmente en la comunidad de Escaba, y la falta de conocimiento que genera rechazo hacia ellos, surge la pregunta: ¿por qué no protegerlos? La ley 7.058, de 2000, protege a la especie Tadarida brasiliensis que habita en los túneles del dique de Escaba, prohibiendo su caza y alteración del entorno. Además, la fundación PCMA, creada para educar sobre la importancia de los murciélagos, logró que la colonia del Dique Escaba fuera declarada SICOM en 2013. Al igual que el patrimonio cultural, el natural también debe ser conocido y protegido por la comunidad.

De todas maneras, hay estudios del CONICET que hablan sobre la disminución de la colonia de estos animales luego de algunas modificaciones que se hicieron en el dique.

El sendero en cuestión

El inicio del sendero está junto al cementerio de los ingleses, siguiendo el camino hacia Escaba de abajo. Había olvidado lo hermoso que es este lugar; la última vez que lo visité fue en 2007. Antes de llegar al dique, pasamos por Villa Batiruana, que me encantó tanto que ahora fantaseo con tener una casita de fin de semana ahí. Aunque todo estaba seco, el verde del paisaje seguía siendo impresionante.

El sendero forma parte del Parque Nacional Aconquija, y al principio nos dio la bienvenida un cartel que decía «Portal Escaba». Este parque tiene varios portales, como La Banderita, Portal Campo de los Alisos, Portal Piedra Labrada y Cochuna. El camino hacia el chorro está bien señalizado y segmentado en 10 partes, lo cual es muy útil porque te sirve para estimar cuánto falta aproximadamente para llegar al chorro.

Empezamos el trekking a las 9 y llegamos al Chorro a las 11:30. El sendero estaba muy bien marcado, con huellas claras que hacían imposible perderse.

Además, los árboles proporcionaban sombra constante, protegiéndonos del sol durante todo el trayecto, incluso al llegar al Chorro.

Hace poco he viajado a Mendoza con mi familia. En ese momento hablábamos con mi hermano sobre algo que nos sucede cuando caminamos por este tipo de senderos que es maravillarnos con los paisajes pero sin poder describir lo que vemos por falta de conocimiento, por ejemplo, sobre la flora del lugar. Por suerte en ese momento estaba con nosotros Flor que trabaja con muchas plantas en investigación por lo que colmaba nuestras dudas con interesantes datos. En esta ocasión ninguno de los caminantes tenía conocimientos extras. De todas maneras, he podido leer sobre algunos árboles que abundan en esta zona y buscando fotos de los mismos llegué a la conclusión que, en Escaba, nos topamos con variedades de algarrobo, cebil horco, arrayán, churqui , tusca, tala. Seguramente con otros más que no he podido identificar.

El área donde se encuentra este sendero pertenece a la ecorregión de las Yungas (que se extiende por todo el noroeste argentino llegando hasta Bolivia), dentro del bioma de Bosques Húmedos de hojas anchas Tropicales y Subtropicales.

Un poco antes de llegar se abren unos claros que permiten observar lo que vas subiendo y ver a lo lejos el gran espejo de agua. La ruta la saqué de un track de Wikiloc pero creo que no hace falta tener uno.

El desnivel positivo es de un poco más de 800 metros (para tener otras referencias: el desnivel en Puertas del Cielo en Horco molle es de 560 metros y el ñuñorco 1200 metros). Considero que es un trekking moderado. Se empieza desde los 736msnm y se alcanza, al menos hasta el chorro, una altura de 1514 msnm (nosotros continuamos con destino al Valle de Casas viejas hasta los 1800 msnm aproximadamente).

Llegado al punto de interés, se observa una pequeña gruta y algunos merenderos. El lugar invita a quedarse un buen rato y la vista desde allí es impresionante; los paisajes desde las alturas de todas las montañas de esta provincia me sorprenden cada vez más. Desde ahí, también se podía ver el dique, y disfrutamos un rato sacando fotos y admirando el paisaje. Que más pedir.

Después caminamos hasta la Cascada Escondida, que, aunque pequeña comparada con otras como Aguas Chiquitas o La Corzuela, me encantó. Esta cascada tiene una suerte de piletón que, me parece, debe ser utilizado por los senderistas que van en épocas de calor.

Decidimos seguir hasta el Valle de Casas Viejas (cruzando el límite de Catamarca), pero nos detuvimos unos metros antes debido a una espesa arboleda con espinas que bloqueaba el camino. Almorzamos allí unos sanguches de queso y tomate que llevamos listos, mientras pasaba sobre nosotros un ave que parecía un cóndor, aunque estábamos seguros de que no lo era.

Empezamos la bajada de regreso a las 14:30, contentos con que todo el camino de vuelta era pura bajada; aunque siempre con cuidado porque, como se sabe, la mayoría de las lesiones en este tipo de actividades se dan de bajada, talvez por la relajación de ir descendiendo o por cansancio. Llegamos al punto de partida, donde dejamos a la rodantera, a las 17. A pesar del cansancio, el regreso se nos hizo eterno. Casi al final del camino, vimos un árbol de pomelo con frutos enormes y no pudimos resistirnos a hacernos de unos cuantos. En el camino también avistamos varias aves, probablemente perdices y garzas.